Madrid, 16 de marzo de 2013 – No ha podido ser. Por muy poco, Sara Hurtado y Adriá se han quedado fuera de la clasificación directa para los Juegos Olímpicos de Sochi y se verán abocados a competir, el próximo mes de septiembre, en la repesca del Nebelhorn Trophy (Obestdorf-Alemania), donde se podrán en liza los cinco últimos sitios.
Los 19 billetes olímpicos que se repartían en el mundial han ido a parar a: Canadá, Estados Unidos y Rusia (tres plazas); Francia, Italia y Alemania (dos plazas); Reino Unido, Ucrania, Lituania y Azerbayán (1 plaza). España ha quedado justo por detrás de Azerbayán.
Pese a este revés, Hurtado y Díaz se pueden marchar muy orgullosos de este mundial, no tanto por la plaza conseguida, la decimonovena la misma que en Niza 2012, sino por la impresión dejada. Han conseguidos marcas ISU en sus dos programas y felicitaciones por parte de los jueces por la mejoría experimentada desde el europeo.
Comenzaban su danza libre con un espectacular elevado estático nivel 4 (GOE +0.43), que antecedía a una buena serie circular de pasos nivel 3 (GOE 0), que ha sido uno de los elementos más trabajados y que más han mejorado últimamente. En los twizzles lograron nivel 4 (GOE +0.29), gracias a una casi perfecta sincronía en el giro. Tras el paso por el elevado en recto nivel 4 (GOE +0.50), afrontaron la media línea de pasos, que fue lo menos destacado de su programa, pues únicamente obtuvieron nivel 2 (buscaban el 3) y sufrieron una pequeña penalización de -0.14. Uno de los puntos más interesantes fue la pirueta en pareja con entrada de travelling, que alcanzó nivel 4 y una ejecución de +0.43. Para el final, dejaron los tres elevados restantes, los efectuados en curva y rotación de niveles 4 y GOEs +0.43 y +0.07 respectivamente y, el coreográfico, que de estándar vale nivel 1, GOE +0.20. Técnicamente, a excepción de la media línea, brillaron a un gran nivel, muy superior al mostrado en el pasado Campeonato de Europa.
Como nos comentaba Adriá por teléfono nada más finalizar su competición, estaban “muy contentos pues habían visto que todo el trabajo desarrollado desde Zágreb había dado sus frutos en un programa con buenos niveles de dificultad y ejecución”. En estos meses, nos hemos centrado en perfeccionar la calidad de la realización de los elementos y eso se ha podido apreciar hoy pues, exceptuando uno, hemos logrado niveles positivos de ejecución, añadía.
Asimismo, se mostraban muy satisfechos por el aumento de la nota de componentes, que abarcaba del 6.07 en transiciones al 6.57 en ejecución, viéndose muchos sietes por parte de los jueces. Sin duda, el panel respondió a un programa con buena coreografía y perfectamente interpretado por ambos.
La nota final fue de 78.16, que supone mejor marca ISU, superando los 76.26 de la final de Niza y acercándose a su máximo personal de 81.04 logrado en Lyon. Esta puntuación les permitía remontar una plaza para acabar en el puesto decimonoveno. Al haber realizado season best, tanto en la danza corta, como en la libre, han fijado un nuevo récord de acumulado con 131.28. Ahora a descansar y, más adelante, a pensar en el Nebelhorn.
FOTO: Hurtado y Díaz en un espectacular elevado en curva.