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Bronce que sabe a oro

Bronce que sabe a oro - HIELO ESPAÑOL

Javier Fernández se cuelga en PyeongChang la medalla que le faltaba en su palmarés

 

Madrid, 17 de febrero de 2018 - Su extensa colección de medallas por fin está completa. Y es que a las cuatro logradas en mundiales, seis en campeonatos de Europa y diez en el circuito del Grand Prix le faltaba una: la olímpica. Una cuenta pendiente para Javier Fernández, a quien un error de cálculo le apeaba del podio en 2014. Cuatro años más tarde, el madrileño ha podido sacarse por fin la espina de aquella fatídica final en Sochi, logrando en PyeongChang un bronce que sabe a oro.

Tras terminar segundo en el programa corto celebrado el pasado viernes, Javier Fernández decidía permanecer aislado para preparar, junto a sus entrenadores los canadienses Brian Orser y Tracy Wilson, la que se anunciaba como la final olímpica con más nivel de la historia. Con más edad y menos dificultad técnica que sus principales rivales, el sueño olímpico pasaba por no fallar el programa largo.

El primero de sus oponentes, el chino Boyang Jing realizaba una sólida actuación pero, una caída en un cuádruple toe y una pobre valoración artística, a priori le descartaban (194,45 puntos y total de 297,77). Era el turno del ‘rey del hielo’, el japonés Yuzuru Hanyu, líder y máximo favorito que no defraudaba en absoluto con su ‘Seimei’. A pesar de descontrolar las salidas del triple lutz y el cuádruple toe, el nipón maravillaba con su calidad técnica, clavando tres cuádruples y seis triples y exhibiendo sus características piruetas de posiciones imposibles para cualquier otro patinador. Con una nota de 206,17 puntos (total 317,85), tenía prácticamente asegurada la victoria.

Cuando en nuestro país eran casi las seis menos diez de la mañana, Javier Fernández saltaba a la arena olímpica para mostrar, una vez más, su ‘Hombre de La Mancha’. Una genial coreografía ideada por David Wilson como homenaje a la cultura española. Un Javi de gesto serio y muy concentrado se colocaba en el hielo. El silencio en el Gangneung Ice duraba apenas unos instantes, los que tardaba en clavar su primer salto: un cuádruple toe. El siguiente elemento era crucial, el combinado de cuádruple salchow y triple toe. No aterrizaba muy cómodo el primer salto y, optaba por dejar en doble, el segundo. Motivo por el que tenía que recolocar este triple toe tras el triple axel que haría unos segundos después. Tras un vertiginoso inicio, tomaba algo de aire con la secuencia coreográfica y la pirueta baja con cambio de pie.

La segunda mitad de su ejercicio arrancaba con otro de los momentos más peliagudos, la repetición del cuádruple salchow. Como ya le había sucedido en varias ocasiones esta temporada, se colocaba mal en el aire y, en este caso, sólo podía cerrar un doble, lo que suponía perder unos nueves puntos en el valor de dificultad de su ejercicio. No se podía permitir ningún otro error más, cosa que no sucedería. Echando mano de su fuerza mental, aterrizaría con maestría sus últimos cuatro saltos: triple bucle, triple axel, serie de triple flip medio bucle y triple salchow y triple lutz. Una secuencia de pasos, dos piruetas combinadas y estaba hecho. Resoplaba y se llevaba el puño al corazón en señal de rabia. Había patinado de forma excelente, aunque esos puntos perdidos en la repetición del cuádruple salchow podrían ser definitivos con para decidir el color de la medalla. Si quería asegurar un sitio en el podio tenía que superar los 190,19 algo que, dado su gran rendimiento, era casi seguro. Los jueces valoraban su actuación en 197,66 puntos (total 305,24) recibiendo algunos dieces (nota máxima) interpretación y coreografía. No era para menos. Lo había vivido. La medalla era suya, ya que se colocaba por detrás de Yuzuru Hanyu cuando sólo restaba un competidor: Shoma Uno.

El también japonés comenzaba con una inesperada caída en el cuádruple bucle pero, en una espectacular recuperación, sacaba adelante un programa repleto de dificultad con tres cuádruples más y cinco triples. A pesar del grave percance inicial, la mayor complejidad de su ejercicio (20 puntos más en valor de base que el de Javier Fernández) le permitió superar a español, consiguiendo así la medalla de plata con una nota de 202,73 (306,90).

El podio olímpico ya estaba, por fin, definido. Oro para Yuzuru Hanyu que se convertía en el primer patinador en 66 años en lograr reeditar una victoria. Plata para su compatriota Shoma Uno y bronce para Javier Fernández. En un bonito gesto, los tres medallistas se fundían en un abrazo mientras el vencedor moral de estos Juegos, Brian Orser (entrenador de Hanyu y Fernández) decidía inmortalizar este instante con su móvil.

Javier Fernández ya no podía ocultar su satisfacción: Estoy feliz de haber dado a España la primera medalla en patinaje en unos Juegos. No es de oro, ni de plata, pero para mí sí que lo es. Conseguir este sueño olímpico ha supuesto muchos años de trabajo y muchas lágrimas. Ahora que lo he conseguido, puede puedo descansar y disfrutar. Quiero dedicar este éxito a mí país y a todos aquellos que me han acompañado a lo largo de este viaje”.

Posteriormente, el español celebraría este éxito con sus padres, ‘Enri’ y Antonio, su hermana Laura y su novia, Marina que quisieron acompañarle en el que será recordado como uno de los días más felices de su vida.

 

La espectacular remontada de Nathan Chen

En una situación bastante paradógica, el mejor programa largo de la final no se vio en el último grupo, sino en el segundo. Y es que, el que a priori era uno de los grandes favoritos, el joven estadounidense Nathan Chen enmendaba su catastrófica actuación en el corto donde terminaba 17º, con un ejercicio libre fuera de serie en el que presentaba, la cifra record de seis cuádruples, de los que realizaba perfectamente cinco de ellos. La descomunal nota técnica obtenida, le permitía ascender hasta la quinta plaza (297,35) en la mayor remontaba vista jamás en unos Juegos.

 

Clasificación final TOP-6

  1. Yuzuru Hanyu (Japón) 317,85 puntos
  2. Shoma Uno (Japón) 306,90 puntos
  3. Javier Fernández (España) 305,24 puntos
  4. Boyang Jin (China) 297,77 puntos
  5. Nathan Chen (Estados Unidos) 297,35 puntos
  6. Vicent Zhou (Estados Unidos) 276,69

 

FOTO: Javier Fernández con su medalla olímpica. Imagen de Nacho Casares para el COE.

09/10/2018